Y con lectura sociopolítica. En serio, lo de El Roto es inmarcesible y excelso.
Pero fíjense que esto de los juicios y los prejuicios tiene más miga (jeje). Miren la proporción entre sentencias positivas y negativas (cuanto más abajo, más negativas) entre jueces israelíes, dependiendo de si habían comido o tenía hambre (líneas punteadas, las comidas):